Por Daniel do Campo Spada
Difíciles
son los momentos para los que somos argentino-uruguayos (al menos desde el
corazón), ya que todos los mecanismos históricos de división
de los pueblos se vuelve a poner de manifiesto en este indeseable incidente
de la pastera europea Botnia instalada en la localidad charrúa de Fray
Bentos. A los dos años de conflicto en las asambleas ambientalistas
entrerrianas, en el paso fronterizo ahora bloqueado por la gendarmería
oriental o el juicio abierto en el Tribunal de La Haya, se agrega ahora los
incidentes que Tabaré Vázquez generó en la XVII Cumbre
Iberoamericana que se acaba de concluir en la Ciudad de Santiago de Chile.
En la crónica disponible en este mismo sitio, en la cual se describe
el discurso del mandatario uruguayo, que apelando a un total cinismo decía
que el rìo no nos divida porque somos un mismo pueblo dividido
en dos países mientras autorizaba el comienzo de la producción
de la pastera. Se quejaba del bloqueo que los asambleístas le están
haciendo a su país (que comparó con el que Estados Unidos le
hace desde hace cuarenta años a Cuba) mientras él ordenaba el
despligue militarizado de la gendarmería cerrando la frontera con Argentina
por tierra y reduciendo el uso del espacio aéreo (con orden de volar
en el aire cualquier nave que transite por allí). Llamaba al diálogo
al mismo tiempo que en forma unilateral daba por tierra con la mediación
del delegado del rey Juan Carlos al tomar una medida inconsulta y que entierra
definitivamente la gestión conciliadora.
En un total alarde de cinismo, al terminar su discurso inaugural, pretendió
abrazar a su par argentino Néstor Kirchner, quien al no responderle
con afestuosidad contribuyó a una escena grotesca desde lo estético.
En un pasillo el santacruceño no despèrdició la oportunidad
de decirle que le había dado una puñalada al pueblo argentino
que en un primer momento se puso tan contento con tu llegada al poder.
La delegación española se mostró sorprendida e incómoda,
a tal punto que el mandatario argentino en su discurso dijo que lo que había
ocurrido era una falta de respeto al rey. Paradojalmente, el propio canciller
charrúa Reinaldo Gargano estaba más incómodo que nadie,
ya que es sabido por todos que es contrario a la forma en que Vázquez
conduce esta crisis, totalmente influenciado por su Ministro de Economía
Lino Astori.
Este último es el hombre de Washington, y por un raro designio
es el verdadero conductor de Uruguay. Desde el primer momento condujo a lo
que todos suponíamos como un esperanzador gobierno progresista del
Frente Amplio como el más conservador de los últimos tiempos.
Dentro de sus puntos básicos está destruir la pertenencia al
bloque sudamericano, por lo que al ser victimario se autoadjudica la posición
de víctima, sembrando en favor de un Tratado de Libre Comercio (TLC)
con Estados Unidos. De esa manera recuperaría su rol de cuña
contra la unión sudamericana, de la misma manera que en el siglo XIX
logró a instancias de Gran Bretaña, aunque con el apoyo de la
oligarquía de Buenos Aires. El concepto de estado tapón
ante una posible unión argentino-brasileña signó su destino,
contrariando incluso al espíritu unionista del propio Padre de la Patria
oriental, el General José Gervasio de Artigas. Desde el vamos, la división
entre Argentina y Uruguay en dos países distintos es inentendible considerando
que se comparte la misma cultura e ideosincracia. ¿Hay acaso muchos
ejemplos de países tan parecidos?
La oportunidad de una América Latina unida se dió en los 90
cuando los gobiernos liberales que imperaban en la región veían
al continente como un gran supermercado, aunque las personas se
quedaran afuera. En el presente, las tendencias ideológicas vuelven
a emparentarse, aunque a diferencia de aquella ocasión hoy los habitantes
somos considerados seres humanos en lugar de medios econòmicos, pero
lamentablemente, desde una nación pequeña, que siempre tuvo
una historia de respeto y coherencia, llega la cuña mas inesperada,
impulsada por Washington (quien guarda un cómplice silencio) e instrumentada
por Europa a través de una de sus empresas.
El rìo ya está contaminándose, pero el continente ha
quedado dañado.
Noviembre 2007-11-09
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