El gobierno de Macri
no deja de sorprender.

Por Daniel do Campo Spada.

La gestión del multimillonario Mauricio Macri al frente del Gobierno de la Ciudad no deja de sorprender. Con un rostro similar al de Freddi Mércury, ideas a la derecha de Carlos Menem y con la popularidad de Vargas Llosa, le encanta gobernar al estilo autoritario de Alberto Fujimori. En su mente habitan ideas del estilo del falso ingeniero Juan Carlos Blumberg y sueña con ser el Rudolf Giuliani argentino. El principal problema es que, a diferencia de todos los otros, no tiene a un George Bush que lo cubra.
Por tercera vez se plantea desconocer un fallo de la justicia que le intima a reincorporar a los 2.400 despedidos (los primeros de un proyecto final de 40 mil en 2008), y no reconoce las limitaciones que la misma jueza Elena Haramburu Liberatori le impuso a su interventor en la obra social de los empleados municipales. Al mismo tiempo, designó como su asesor a Nicolás Caputo, un empresario que le factura a la Ciudad una cifra cercana a los $ 80 millones. El Jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta quiere judicializar las protestas.
Atendiendo a una presentación de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), la jueza Liberatori ordenó retrotraer la situación de los trabajadores despedidos al 31 de diciembre de 2007, cumpliendo su inmediata reincorporación a sus puestos de trabajo. Hasta ahora, las delegaciones del gobierno municipal les impidieron el ingreso. Muchos de ellos pertenecen a UTE, y se encontraban en planes de inclusión educativa. No se descarta que esto provoque un retraso en el comienzo del ciclo lectivo. Además, la jueza ordenó que se los incluya en el censo que el empresario pactó con el otro gremio (SUTECBA) para determinar quienes son o no “ñoquis” (eufemismo utilizado para aquellos que cobran sin trabajar). El PRO, partido de derecha en el poder porteño, quiere impugnar a la jueza.
Además, en un acto sospechado de corrupción, y faltando a la ética mínima, Macri designó a Nicolás Caputo como asesor “ad honorem”. La diputada porteña Gabriela Cerrutti marcó lo sospechoso de la designación ya que es el último decreto del año 2007, con una situación retroactiva al 10 de diciembre, y que se conoció diez días después. El flamante “colaborador” le factura a la Ciudad casi 80 millones de pesos. Eduardo Videla, en la edición del 16 de enero de 2008 escribe que Caputo S.A., es la encargada de la construcción de la sede de la Orquesta Filarmónica, del Parque de las Mujeres en Puerto Madero, en sociedad el Hospital Lugano y la reconstrucción del Centro Metropolitano de Diseño. Por otra parte, en la redacción de ECO Informativo DigiTAL creen que por medio de interpósita persona sería socio de alguna de las concesionarias de recolección de residuos.
Mientras espera que le den el manejo de la Policía Federal, su Jefe de Gabinete Horacio Rodríguez Larreta diseña una fuerza se seguridad para la ciudad y la judicialización de las protestas. Por el momento se mueven (como en el caso de las filmaciones extrajudiciales del supuesto vaciamiento de la Obra Social de los municipales – ObSBA) con custodios y empresas de seguridad privadas, muchas de las cuales están sospechadas de emplear a la “mano de obra desocupada” (ex represores). Además quieren judicializar las protestas, instaurando un sistema de identificación de sus líderes, a los que quieren llevar a los tribunales, para de esa manera “no molestar a los vecinos con sus problemas” (dixit). Les causa gran enojo porque la Federal, bajo control del Gobierno Nacional, no usa armas de fuego ni carros hidrantes en las manifestaciones.
Respecto a la Obra Social, designó un interventor, el ex gerente de SOCMA (Sociedad Macri) Jorge Rey como interventor. Con la excusa de llevar a cabo la desregulación (por la que los empleados municipales podrían optar por otras obras sociales), sus empresarios amigos estuvieron formando centros privados atentos para captar a los salientes afiliados. Una vez que estaba listo el sistema no estatal, con la ayuda de la también derechista Coalición Cívica legislaron la desregulación. Solo un dictamen de la jueza Liberatori le impidió momentáneamente desguazar los servicios que atienden a casi 300 mil personas, un tercio de ellos jubilados.
En la atención médica se espera una de las grandes batallas que se vayan a recordar, ya que sigue en pie la idea de discriminar en los hospitales públicos a aquellos que no pertenecen a la Ciudad de Buenos Aires. La acción preventiva del INADI podría frenar un poco los embates iniciales, que incluso quieren arancelar todos los servicios. Es bien sabido que gran parte de la población apenas llega a los centros médicos para irse con el diagnóstico y la receta en la mano. Sabiendo la patología, recurren a remedios caseros ante la imposibilidad de abastecerse de medicamentos. El bloque del PRO vetó la posibilidad de que la Capital fabrique medicamentos económicos con claros fines sociales. En el convencimiento de que ello podría atentar contra la rentabilidad de los laboratorios, se relegó el aspecto social.
Macri da las conferencias de prensa sin posibilidad de ser preguntado por los periodistas presentes, por lo que nadie ha podido preguntarle por la veracidad de declaraciones que circulan por el Ministerio de Educación de su gobierno, en el cual sería idea de Mario Nadorowski comenzar con lo que se dispone, sin preocuparse por una importante matrícula que no tendría vacantes para comenzar el ciclo lectivo. “Fijensé en los colegios privados”, contestan sus funcionarios, quienes responden que si sus padres no tienen dinero no es problema de ellos ya que han sido votados para administrar, “no para hacer milagros”.
Sin duda que el gobierno del empresario Macri comenzó haciendo ruido, aunque aún no se sabe si el mismo es de construcción o de derrumbe.

 

Enero 2008-01-17
NOVO MundusNET
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