Por Daniel do Campo Spada.
Vamos
a ir a joder a ese cabrón en su propia casa, dijo uno de los
participantes de la reunión de la Fundación Libertad en Rosario
el año pasado. El cabrón es el Presidente constitucional
de la República Bolivariana de Venezuela. Sus guardaespaldas, que no
bajaban de cinco por participante se imaginaban un viajecito a Caracas que
ahora están concretando. El ex peruano (ahora se identifica como español
y vive en Londres) Mario Vargas Llosa, quien perdiera su único intento
presidencial contra el también ultra derechista Alberto Fujimori, hoy
detenido por violación de los Derechos Humanos, fabricó un incidente
junto al canal golpista Globovisión en la entrada del aeropuerto caraqueño.
Los medios de las clases altas, pro-Consenso de Whasington, reunidos en el
GDA (Grupo de Diarios América) dan repercusión a una información
fraguada.
Mario Vargas Llosa y su hijo Alvaro son desde hace más de una década
los encargados de vestir de intelectualidad a un movimiento que
solo tiene como fin generar excelentes negocios transnacionales. En Argentina
ese papel lo hace el escrito Marcos Aguini. Para ello deben desautorizar cualquier
intento de gobierno popular que logre implementar medidas que aunque justas
en cuanto a salarios o dignidad laboral, recorte sus deseos de ganancias.
En una elección de algo de todos o solo para unos pocos a costa
de los demás, elijen esta última. El egoísmo es
la bandera de la derecha. Basta leer los sitios de internet de la mencionada
fundación rosarina o las de las argentinas Pensar, Red Libertad, ESEADE,
Fundación Carlos Pellegrini y la Fundación Naumann, o las extranjeras
The Heritage Foundation, CATO Institute, FAES, ATLAS, FIL, FIE, RELIAL, PADF,
Diario Exterior y Perspectivas para darse cuenta de ello.
En Caracas, donde han ido con la clara intención se buscar un incidente,
también concurrieron el ex Presidente Vicente Fox y su canciller Jorge
Castañeda, responsables de una de las peores crisis sociales del gran
país latinoamericano y el historiador Enrique Krauze. La filial venezolana
es el Centro de Divulgación del Conocimiento Económico para
la Libertad (CEDICE), donde entre otras preocupaciones está la investigación
que el Gobierno de Bolivia está haciendo por el intento de asesinato
del Presidente Evo Morales en una red que involucra a mercenarios de Argentina
y Europa (fundamentalmente españoles ligados a José María
Aznar). La fundación caribeña está integrada
(según afirma el matutino porteño Página 12 del 30 de
mayo) entre otros por Carlos Granier, hermano del dueño de RCTV, canal
al que le venció la licencia luego de violar todas las reglas de la
ley y que se encargó de construirse un perfil de víctima
de un supuesto monopolio chavista.
El incidente que protagonizó el escritor españolizado fue uno
de los más burdos. El accionar de los periodistas de Globovisión,
fundamentalmente de la cronista Beatriz Adrián, quien hace unas semanas
enredó al legislador comunista Miguel Flores para hacerle
creer a la audiencia que sus representantes cobraban cifras monstruosas, cuando
en realidad la víctima hablaba de anuales y la victimaria lo hacía
pasar como mensuales. La construcción de realidades falsas
es una permanente de la nueva (vieja) derecha mediática.
A la cita no podía faltar Jorge Quiroga, ex Vicepresidente del dictador
boliviano Hugo Banzer Suárez, sobre quien caen sospechas de los asesinatos
durante su régimen en flamantes investigaciones realizadas en Teoponte,
en el Departamento de La Paz, que el Equipo Argentino de Antropología
Forense (EAAF) está ayudando a esclarecer. Esto marca una coherencia
ya que comparte hotel con el pinochetista Joaquín Lavín de la
Unión Democrática Independiente.
En Argentina, uno de los congresos que realiza la Fundación Libertad
lo ha cerrado en estos días el Vicepresidente Julio Cobos, un ícono
de la derecha mas rancia desde que cumplió una auténtica traición
al Gobierno que lo llevó a ese lugar, la aciaga noche del triunfo de
los terratenientes que se quedaron con miles de millones que hoy estarían
siendo invertidos en hospitales y escuelas. En Caracas se encuentra el escritor
ultra derechista Marcos Aguinis, quien ha lanzado un libelo llamado Ay,
Patria Mía. Obviamente no hace referencia al menemato. Ricardo
López Murphy y personeros de segunda y tercera línea de los
multimillonarios Mauricio Macri y Francisco De Narváez se encuentran
presente, salvando a sus jefes de la molestia en plena campaña electoral.
Los dirigentes norteamericanos de USAID, que durante los regímenes
de George Bush fueron el manantial para financiar desde Alvaro Uribe en Colombia
hasta el golpe de Estado en Venezuela en 2002 pasando por el nuevo
Alan García de Perú, prometieron que a pesar del discurso seudo
progresista del Presidente Barack Obama, seguirán financiando
actividades irregulares, generalmente disfrazadas de ONGs de lucha por
la libertad.
Los diarios El País de Montevideo y Madrid, La Nación de Buenos
Aires y El Mercurio de Santiago de Chile llevan adelante sendas coberturas
en las que buscan la forma de generar incidentes que traten de magullar a
Hugo Chávez.
La democracia no es el juego que les gusta, sobre todo cuando los pueblos
empiezan a votar en favor de la justicia social y no a favor de los intereses
de las clases altas. Mientras encuentran una vuelta a las dictaduras que tiñeron
de sangre al continente, tienen un objetivo: destruir el presente para ganar
tiempo. No sea que los ciudadanos despierten de los engaños mediáticos.
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MAYO 2009-05-24
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