¿El Opus Dei copó la conducción de la Iglesia Católica?
Por Daniel do Campo Spada.
Desde
ya cabe aclarar que el título de la nota no responde a la intención
de la respuesta. Poder afirmar ello requiere de una investigación que
supera las expectativas de estas líneas, por lo que debemos acotar.
En realidad, la jerarquía de la Iglesia Católica dió
un fortísimo paso en falso en el debate del matrimonio universal, desprestigiando
a la milenaria institución que nos contiene a millones de creyentes.
Una dirección demasiado preocupada por lo terrenal descuida los temas
esprituales inducidos por la tenebrosa organización Opus Dei.
El Cardenal Jorge Mario Bergoglio, es una persona en sus sermones, netamente
jesuitas, y otro cuando se pone al frente de la institución eclesial.
Cabe saber cual es el verdadero, ya que son netamente distintos. Es inconcebible
un estilo de la Compañía de Jesús con un apoyo a la extrema
derecha que sí es propio de la organización española
Opus Dei que fundara Monseñor Escrivá de Balaguer. El integrismo
del que hace gala esa prelatura es mas propia de la Edad Media que del presente.
La intolerancia y la intrasigencia que expone dejaría afuera a todos
los creyentes ya que solo podrían cumplir sus preceptos santos de verdad.
Claro que como católico normal, muchos de esos santos son
falsos santos.
Cuando llega la Navidad circula una frase que busca llamar la atención
contra los excesos consumistas en las que supuestamente Jesús dice
que es su cumpleaños pero que nadie lo invita a su fiesta. Quienes
propiciaban la discriminación de derechos hacia los que eran distintos,
¿habían recibido instrucciones de Cristo? No me imagino a Cristo
discriminando. Si Dios es el Creador, todos somos sus creaturas y aunque hay
ángeles caidos que también fueron inspirados por Él,
una diferencia de género no es precisamente ello.
El discurso intolerante de algunos medios católicos como Cristo Hoy
y Nueva Lectura terminó por decidir a muchos creyentes practicantes,
que vieron en esos discursos sin sustento a las mismas barbaridades discriminativas
que sufrieron los heterosexuales separados. Discursos ofensivos en los que
sin ningún sustento científico hablan (y hablaban) de niños
atromentados, criados en hogares demoníacos y otras paparruchadas que
de tan tremendas despiertan risa.
En Agosto se encontrarán los responsables de la jerarquía en
la Reunión de la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal
Argentina y allí tendrán que reveer cual es el resultado del
poder que hoy esgrime el Obispo de la La Plata, Monseñor Aguer, quien
con fuerte ligazón al Opus Dei, de origen franquista y monárquico,
terminó impulsando en esa dirección al propio Bergoglio. Los
treinta obispos prepararán el temario para la próxima Asamblea
Plenaria, que venía perfilada con una clara orientación política
de derecha tras el documento generado por el privatizador menemista Roberto
Dromi.
La Iglesia argentina aparentemente sigue los lineamientos que el Vaticano
quiere imponer a nivel mundial, donde prefieren que haya pocos fieles pero
casi santos en un mundo que consideran en descomposición y netamente
irrecuperable. La carta que Bergoglio le envió a las hermanas de las
Carmelitas Descalzas se filtró a través del diario Tiempo Argentino
y la frase guerra de Dios contra el príncipe de la
mentira terminó superando a la que había preparado la
cúpula religiosa de todos los chicos tienen derecho a un papá
y una mamá.
En la base no solo los creyentes sino muchos sacerdotes quedaron atrapados
entre los caprichos dogmáticos de la cúpula con la realidad
cotidiana en la que conviven parejas hetero u homosexuales con las mismas
virtudes y desaciertos que cualquier familia mas allá del género.
La ley sincera desde lo legal lo que ya es realidad en muchos ámbitos
mas allá de los tiempos jurídico-legales.
La presencia del Opus en el debate por la normalización de los matrimonios
fue encabezada en la Cámara Alta por la senadora puntana Liliana Negre
de Alonso, ligada académicamente (fue docente y directiva) con la Universidad
Austral, perteneciente a La Obra. El diario Buenos Aires Económico
en su edición del 18 de julio del corriente relata además que
entre sus colegas legisladores reparte cuadernillos de Escribá de Balaguer,
español fundador del Opus Dei, sostenido por las clases altas y la
monarquía mas rancia. En realidad, no existe monarquía que no
sea rancia.
Negre de Alonso fue la voz cantante en contra del matrimonio universal y su
identificación católica (tiene habitual participación
en foros de familia organizados por sectores ultramontanos e integristas en
los que se condenan no solo a los homosexuales sino también a las familias
heterosexuales ensambladas) nos ponen en un apriete a los que somos fervientes
católicos pero que desde otra interpretación creemos en un Cristo
Amigo. Un amigo que toma el colectivo en las mañanas, que se sienta
con gran dolor junto al que no tiene trabajo, abraza con compasión
al niño que fuma paco, que también entiende al rico que llora
en su auto de cientos de miles de dólares, pero a la noche, cuando
va a descansar, duerme a metros de una capilla de un cura villero y no en
un Palacio El Vaticano.
¿Se derechizó la Jerarquía Católica? La respuesta
es distinta. No debe ni derechizarse pero tampoco izquierdizarse. Dios es
otra cosa. Sí es irrenunciable la opción por los pobres. Eso
lo dicen incluso los católicos derechistas, pero condenan sin la mas
mínima compasión cristiana a quienes hacen una opción
sexual distinta a la que hacemos la mayoría y luego toleran a sacerdotes
torturadores y pedófilos. El tamiz que se usa es obsceno y seguramente
muy lejos de Cristo. ¿Como cristianos no vamos a levantar nuestra voz
en contra de la anomalía que significa la existencia de monarquías
en pleno siglo XXI?
do Campo Spada, 2010
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JULIO 2010-07-24
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